Considero que la palabra “psicólogo” es catalogada aún en nuestra actualidad, de manera errónea; creemos que solamente se asiste a él si tenemos un problema mental grave, estamos todavía en la etapa de romper con los paradigmas del verdadero trabajo del psicólogo en nuestra sociedad, tenemos miedo del qué dirán las personas de nuestro alrededor si se enteran que voy al psicólogo, principalmente nuestros familiares, amigos o en el trabajo. 

Cuando presentamos alguna sintomatología de un mal físico acudimos inmediatamente al médico, y eso es visto de una manera normal y cotidiano, sin cuestionamientos nos sometemos a los tratamientos necesarios, pero lamentablemente cuando se trata de nuestra salud mental o emocional, consideramos que no es importante, que sólo es cuestión de llamar la atención, que un amigo puede escucharnos y listo, todo quedará bien.

Pero, ¿por qué es importante acudir al psicólogo?

Como primer punto es para mejorar nuestra relación con nosotros mismos, muchas veces somos adultos sin conocernos, sin tiempo para nosotros, simplemente viviendo apresuradamente en la monotonía diaria, vivimos enojados, sin un plan de vida o hasta frustrados sin entender los motivos. 

De igual forma, al buscar estar bien con nosotros, lograremos mejores relaciones interpersonales, tener una mejor convivencia con las personas de nuestro alrededor, o poder resolver conflictos inconclusos del pasado con ciertas personas o situaciones.

Nuestra salud mental es primordial en el manejo de nuestra vida cotidiana, pues implica la capacidad que tenemos para sobrellevar problemas, en la toma de nuestras decisiones, en la forma en que nos relacionamos con la gente a nuestro alrededor y en cómo reaccionamos ante las adversidades presentadas, como por ejemplo la contingencia que se vive hoy en día. 

Simplemente, acudir al psicólogo nos permitirá un mejor desarrollo como individuos, como los seres complejos que somos, así que sin importar aún los tabús relacionados al “psicólogo” recuerda que primero está tu estabilidad emocional, mental, personal y hasta física y la de las personas que te rodean. Cuando mejoramos con nosotros mismos, mejoramos con todo lo que nos acompaña. No es visita a un “loquero”, es visita a un acompañamiento para mi desarrollo humano, es un tiempo que me dedico para mejorar.